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El cruce entre lectura, enfoque de género y el vínculo con otros productos culturales es una excelente forma de explorar nuevos formatos porque abre un abanico de posibilidades y nos permite conversar un mismo idioma con las y los adolescentes. Acá te presentamos algunos podcast y películas que podrían ampliar el análisis y la conversación, desde lo literario, lo sonoro y lo visual.

Por Melissa Cárdenas

Al pensar en lectura es probable que inmediatamente imaginemos un libro impreso en papel o, para quienes están familiarizados con la tecnología, sumamos lo digital, es decir el libro electrónico o la lectura a través de la pantalla. Pero no siempre nos damos cuenta de que vivimos expuestos a diversos sistemas que van más allá de lo textual o lo lingüístico, como son las imágenes, los sonidos, el movimiento, el entorno, etcétera. La idea de “preservar un espacio muy diferente que privilegie el juego, los intercambios poéticos, la curiosidad, el pensamiento, la exploración de sí y de lo que nos rodea”, ya lo decía Michele Pètit en su ensayo Leer el mundo (2016). Investigadores como Lucas Ramada, creador del canal español dedicado a la ficción infantil Esto no va de libros, señala que la lectura hoy en día es cualquier ejercicio de decodificación de un texto; entonces es clave empezar a entender que casi todo es texto. Ramada amplía el concepto de lectura al integrar los videojuegos y considera que estos tienen narrativas complejas y literarias. Pero no solo eso, también invita a hacer cruces con otros productos culturales, entendiendo que este cruce transmedial permite una lectura crítica de la actualidad. Y es aquí donde quisiera poner el lente: en el cruce con otros productos culturales que las nuevas generaciones están consumiendo y que representan insumos para la formación de lectoras y lectores, ya que amplían universos creando una lectura mucho más rica en cuanto al imaginario y conexiones personales. Como bien señalamos anteriormente, leer con enfoque de género no significa escoger títulos que tengan solo personajes femeninos forzosamente empoderados y dejar de lado los clásicos de la literatura, porque estaríamos desatendiendo la época y el contexto en que fueron escritos (otro punto importante en el que podemos detenernos y analizar). Es más bien, como plantea Teresa Colomer, intentar conocer y definir modelos literarios y de conducta que ayuden a las chicas a verse como sujetos y no objetos, alejados de la mirada masculina y asumiendo los riesgos de la lucha por el espacio exterior sin renunciar a sus modos de ser, a su esencia. Entonces, esta coalición entre lectura, enfoque de género y el vínculo con otros productos culturales me parece que es una excelente forma de explorar nuevos formatos porque abre un abanico de posibilidades, pero también nos permite conversar un mismo idioma, sobre todo con las y los adolescentes. Acá te presentamos algunos podcast y películas que podrían ampliar el análisis y la conversación, desde lo literario, lo sonoro y lo visual.  

Podcasts literarios feministas

Los podcasts literarios son un nuevo formato de análisis y conversación sobre una obra literaria. Esta serie episódica con archivos multimedia nos ofrece una nueva forma de experimentar la crítica literaria. La deriva feminista es un programa realizado por tres amigas que durante la pandemia comenzaron con un club de lectura femenino. Estas conversaciones sobre sus lecturas personales permiten nutrir nuestras propias lecturas, pero también ampliar nuestras voces, entendiendo que algo que podemos pensar de manera individual, puede ser también colectivo. La crítica que realizan María Victoria Muñoz, Violeta Véliz y Lucía Carrillo sobre los libros que escogen es un motor para conocer el contexto y la vida de las autoras presentadas, para detenernos en algunas ideas claves de cada narración, entender en algunos casos ciertos movimientos políticos y sociales, y por supuesto, seguir leyendo a mujeres. Otro podcast que permite hacer un cruce interesante con la literatura, en este caso con la narrativa gráfica, es La polola, un programa conducido por Marcela Trujillo (Maliki) y Sol Díaz, dos ilustradoras chilenas que principalmente conversan con mujeres del mundo del cómic. En este programa las anfitrionas trazan una línea de conversación que permite conocer el contexto en el que fue escrita la obra, pero también resulta interesante la recapitulación sobre la vida y la experiencia de cada entrevistada, ahondan en sus procesos creativos y en sus referentes.  

Películas feministas

Es cuestión de género es una película dirigida por la directora estadounidense Mimi Leder y resulta un filme muy inspirador pues es una oda a la lucha de las mujeres por la igualdad. En 1956, Ruth Bader Ginsburg es una de las nueve mujeres en una clase de casi seiscientos estudiantes que desean convertirse en los futuros “hombres de Harvard”. La película nos muestra a una estudiante en la facultad de Derecho teniendo que compartir este rol con muchas otras facetas que experimenta una mujer durante su vida adulta: ser madre, profesora, atender el hogar, cuidar a su familia y luchar contra la violencia institucional en un mundo principalmente dirigido por los hombres. Ruth dedicó su vida a la lucha por la igualdad legal entre hombres y mujeres, pero también trabajó incansablemente por los derechos de homosexuales y minorías raciales. Otra película que podría llevar a una potente conversación es Las sufragistas, dirigida por la británica Sarah Gavron. Esta historia se centra en la historia de Maud Watts, una joven humilde y trabajadora, casada y con un hijo, que se une al movimiento sufragista animada por la activista política y una fugitiva de la ley, Emmelinne Pankhurst. Una película que se inspira en hechos reales, acerca de las mujeres dispuestas a dar la lucha en favor del voto femenino y la igualdad en los inicios del siglo XX en Gran Bretaña, junto a cientos de mujeres de todas las clases sociales, dispuesta a sacrificar sus trabajos, hogares, hijos, incluso sus vidas si era necesario, para obtener el derecho a voto. Esta película se contextualiza en la primera ola del feminismo, tiempo en que se buscó la igualdad jurídica y el respeto por los derechos de la mujer en un sistema donde el problema no era individual, sino de una estructura predominante, la masculina. Y si de diversidad de películas feministas se trata y considerando la dispar vitrina que las mujeres creadoras y protagonistas de historias han tenido históricamente, para un grupo que ame la ciencia ficción Madmax resulta una muy buena opción de debate a partir de la genealogía guerrera de las madres del paraje y de Furiosa, personajes que han resistido a secuestros, esclavitud sexual y constantes violencias desde quienes “gobiernan” los territorios. Para los grupos con gustos más clásicos, Thelma y Louise, de Ridley Scott, son dos personajes que nos enseñan sobre sororidad y liberación, porque absurdamente a los personajes femeninos siempre los persiguen las situaciones más brutales, aunque intentes huir. Y si queremos entrar en un debate más actual, la película Barbie y su omisión en la última versión de los premios Óscar nos dará de qué hablar. El hecho de que ni la directora, Greta Gerwing, ni la actriz principal de Margot Robbie, hayan sido nominadas, pero sí Ryan Gosling, actor que interpreta a Ken, y por partida doble, nos dará muchas luces de la corriente aún imperante.