El cadáver exquisito es un poema colectivo lleno de sorpresas, inventado por los poetas surrealistas. Te invitamos a jugar junto a tu familia con esta adaptación a partir de tres conceptos: observar, recordar e imaginar.

El cadáver exquisito es un poema colectivo inventado por los poetas surrealistas. Para realizarlo, un poeta escribe una palabra o una frase al azar en una hoja y la dobla para que su verso quede oculto. Luego, entrega el papel a otro poeta, que no sabe nada de la primera frase, y este escribe otro verso; también dobla el papel y hace entrega al autor de la frase inicial o a otro escritor que también esté jugando. De esta manera van formando un poema lleno de sorpresas.

Te invitamos a jugar junto a tu familia con esta adaptación del cadáver exquisito. Para eso te proponemos tres conceptos que guiarán a los participantes del juego en caso de que estén con la mente en blanco: observar, recordar e imaginar. Así, por ejemplo, uno podrá mirar a su alrededor e inventar un verso, otra podrá recordar alguna anécdota y crear otra frase. De esta forma podrán crear su cadáver exquisito familiar.

Materiales

  • Cartulina de colores
  • Hojas blancas
  • Plumón negro o varios plumones de colores
  • Lápiz grafito
  • Tijeras
  • Pegamento en barra

Pasos a seguir

1. Corta tres tarjetas de cartulina del mismo tamaño. Te puedas guiar por una tarjeta de presentación o algún carnet que tengas a mano que miden aproximadamente entre 5,5 x 9,5 cm.

2. En una escribe la palabra OBSERVAR, en otra RECORDAR, y en la última IMAGINAR. Además, recorta una o varias hojas blancas del mismo tamaño para que todos puedan escribir.

3. Cada participante deberá escoger, al azar, una de las tarjetas y escribir el verso que quiera. Cada uno puede escribir con un color distinto. Pueden, después, intercambiar tarjetas para escribir la mayor cantidad de imágenes poéticas que quieran. ¡Así quedará un poema mucho más extenso!

4. Cuando ya tengas todos los versos, junto a tu familia léanlos y ordénenlos de la manera que ustedes quieran para darle vida a su poema colectivo. Recuerden que pueden jugar mucho rato con el orden de los versos hasta llegar al texto definitivo. Para terminar, pega todos los versos y no olvides ponerle título. ¡Ya tienes listo tu cadáver exquisito familiar!